Recuerdo
Cuando los muros de mi consciencia quedan demasiado estrechos
Y mi alma no podía contener el silencio sordo que se aglutinaba
Haciendo de mi sueño una melodía imposible.
Pero le duelen los ojos de no ver
Le duelen los labios de no gritar.
No elegí dormir y vivir soñando
Mirar y seguir caminando.
Cuando hay tanto polvo en la belleza
Que amarla ya no es opción.
¿Sino destreza u obligación?
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